Desasosiego

Hoy estoy especialmente harta.
Éste se suma a los días en los que quisiera mandar mi trabajo a la chingada. De esos días en los que me cuesta más que nunca tolerar la injusticia y el valemadrismo de la gente, la pinche jodidez y mediocridad.

Y no quiero sumarme.

Cómo demonios hago lo que quiero.
Ya no fui estrella de rock ni escritora ni trotamundos ni actriz de teatro y me escabullí de uno de mis sueños, pero no quiero ser de éstos y aquéllos que se acomodan a como va la vida.

Y quiero dejar de arrepentirme.

Cómo putamadre lo hago.

Rezando

Una plegaria



Que se vayan los libros al retrete, que vuelen las plumas al abismo, que corra la hoja hacia la nada y se lleve mi musa entre sus líneas.



Que se vayan uno a uno los segundos de mi tiempo tic... toc, tic... toc, que las manecillas marquen la no existencia.



Que se sume a todo eso los ojos de los muertos y el miedo de los vivos.

Amén.

paix

para enredos, telenovelas. yo sólo quiero paz, paz,

¡paaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaz!

ya no puedo, neta.

mamá dice

Dice mi mamá que cuando estaba morrita lloraba mucho.
Una de dos: o no he crecido o...

No, no he crecido.

¿La primera o la segunda?

1a. Hay quienes pasan la vida juntos...

2a. ... y quienes viven la vida juntos.

écrire. écrire. écrire

Tengo muuuuchas ganas de escribir, muchas, muchas.

 

Soy fiel seguidora de dos pares de blogs, y uno más; dos de quienes escriben en ellos no tienen idea de mi existencia (si a veces yo no la tengo, qué puedo esperar), pero para mí el sólo leerlos me acerca un poco a ellas (mujeres, ambas, rebuenas pa' la escritura); los otros 3, grandes-buenos-lindos-inteligentes amigos.

 

Sé que me lee el Deivid (saludos, mi Deivid) y chance el Moy.

 

No calificaré mis textos (trataré) ni me lamentaré con un 'Ay, pero de qué va a escribir una simple mortal como yo'. 

Na, a la goma. 

Lo que sea.

 

Tiro los dados y a ver qué sale.

Ojalá un Todos Ponen. 

de vuelta y vuelta

Ayer volví al trabajo.

Hoy, alguien me dijo: "Todo sigue igual. Seguimos siendo los mismos". No lo creo.

Ahora, todo aquí es diferente. Todo. No diré por qué, pues intento, si no eliminar cosas de mi memoria, por el momento no recordarlas. Tal vez mientras tenga el valor de pronunciarlas sin lamentos.

Siento como si mi ausencia en este lugar hubieran sido unas vacaciones. Y, en el camino, se desgajaron cerros y quedé sepultada en el alud.

Las cosas no andan bien. Mi vida no anda bien, pero intentaré, con todas las ganas, que tome el mejor camino, el que me haga feliz.


Volví por mucho. No por ti.

Hay alguien que me hace mucho bien, mucho, sólo que...

cuídame de ti

espacios suspendidos en la noche

noches espaciadas

suspendo mi respiro 

respiro profundo

cercana tu ausencia me desvela

develo tu inocencia

no mientas, por favor, no mientas, que te creo

De a poco...

Dije que no hablaría de sentimientos, ni buenos ni malos, así que, por aquí, te diré que mi pecho se llena al mirarte dormir; al ver tu cuerpo desnudo cubierto con el edredón con el que nos hemos cobijado mil veces tras hacer el amor y, aun, al escuchar tus ronquidos, esos de alguien perdido en un sueño profundo, tan profundo como lo que mi pecho siente.

Poco a poco. Sé que será así. Y te lo agradezco con sinceridad. Gracias por el tiempo extra, por los minutos regalados, los cuales me servirán como bálsamo para transformar lo que siento hasta que, poco a poco, desaparezca.

Te amo más allá de donde viene la lluvia, y te amo más allá de donde se evapora.

Buen día, mi día.

Te amo para siempre, González.

¿Y las letras?

Cuando nació la idea de hacer un blog tenía, según yo, muchas cosas por escribir. Incluso, puse en una carpeta textos que pudieran servir para que mis cuatro lectores -como dice Catón- pudieran conocer poco de mí.

Nada de eso ha pasado. Muchas veces abro el blog, y nada, vuelvo a guardar el borrador. Resultado: los textos siguen guardados, los leo yo, ja.

Hay veces que, mientras estoy haciendo cualquier cosa, pienso ¡Ah! Esto lo voy a poner en mi blog. Otra vez, nada.

Espero no abortar esta ocasión.

Me gusta leerme.

A veces podemos pensar que nuestras ideas, las que sean, de nada servirían a los demás. Pero no es cierto.